

Más “salud” a Héctor Bitar, quien ofreció cena en su casa con su esposa Irina para el champañero Clovis Taittinger. La cosa es que toooodos los invitados se pusieron una buena y divertida jarrita porque les ofreció de sus mejores champagnes. Entre Françoise Lavertú y Gina Pineda, Ariadne Grant y Gael Duboise se entonaron al parejo que Pedro Torres, su novia Roberta López Negrete y sus tres amigos colados, quienes fueron los maaaaaas “felices” de la noche; estaban cante que cante con Fey, quien es amiga de Bitar.
Hablando de chamacas fiesteras Cuca Díaz presentó proyecto, o sea, su nueva tienda de ropa diseñada por ella con una peluquería dirigida por Jonathan Más, se llama Concepto 1 ahora sin naaadieeee que le haga sombra. Obvio, llegaron todos sus amigos y sus guapos hermanos, pero la buena noticia no fue esa sino que afortunadamente ya no anda con el fulano que traía antes de novio, un patansete que no se la merece y del que por fin se deshizo para nunca volver. Así que pónganse listos chavos, porque mi Cuca anda soltera y más guapa que nunca.
Por otro lado, les cuento que Paulita Arango se nos comprometió por tercera ocasión con su novio el inversionista colombiano, Nicolás Gómez. Pero esta no es la noticia, sino que esta vez la boda no será en La Paz, como iba a ser la anterior, sino que será en el Distrito Federal, para no repetir wedding plans pasados. La noticia no le hizo gracia a su papá, quien es totalmente bajacaliforniano, pero, ni modo, con tal que la hija salga…
Por último, les cuento que Diego Luna estuvo en la casa de la embajadora británica Judith McGregor para la presentación de la feria de cine London MexFest. Lo curioso es que llegó, estuvo en el discurso y salió corriendo antes de que los presentes se atrevieran a preguntarle cómo le va la vida de soltero. Pero lo más chistoso fue que la embajadora quería tomarse una foto con él y nunca se lo llevaron sus súbditos. Pero fue todavía más chistoso que, cuando Diego se salió a la banqueta en Virreyes a esperar su carro en el valet parking, todos los invitados se tomaron fotos con él. Bueno, todos menos la embajadora, quien se quedó con las ganas.
Byeeeeeee.
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